Al contratar un seguro para la casa no solo estamos garantizando una protección para el continente y el contenido de la vivienda, sino que se contratan otras interesantes coberturas para protegernos y proteger a nuestra familia fuera del domicilio familiar.

Las aseguradoras, al ofrecer un seguro de hogar, suelen trasladarnos la idea de ser los más competitivos y que ofrecen las mejores coberturas al mejor precio, pero no tienen en cuenta las necesidades reales del asegurado.

Cuando uno se va de vacaciones o va a estar fuera del domicilio (ya sea por ocio o trabajo) lo primero que debe de tener en cuenta es que los ladrones también están al acecho. Por eso es muy importante tener contratado un seguro del hogar con las coberturas que necesitas.

En relación al aseguramiento obligatorio nos referiremos en primer lugar a una de las cuestiones que sigue concitando muchas consultas o gestiones y es el tema relativo a su exigencia aunque el vehículo no circule.

El aumento de los patinetes eléctricos en las ciudades es evidente y su uso se ha convertido en una forma de movilidad para desplazarse, lo que va suponiendo una circulación compartida con los vehículos a motor y un aumento en el riesgo de accidentes.

El entorno en el que nos movemos, donde la palabra crisis genera incertidumbre, está motivando que la política de ahorro familiar conlleve recortes en conceptos que se consideran no ser importantes. Este es el caso del seguro del hogar.

Una de las muchas motivaciones de compra de bicicletas eléctricas es el coste cero en mantenimiento y su potencial como vehículo alternativo, la puerta de entrada al ciclismo y a una vida más saludable, que de otra manera, tal vez no se hubiera logrado nunca.

La obligatoriedad de contratar un seguro o de renovar el seguro, dada la alta siniestralidad de este tipo de vehículos, no es una tarea sencilla, pero se hace necesaria para estar cubiertos ante la posibilidad de un siniestro. Ya de por si el hecho de que las motocicletas tengan dos o tres ruedas hace aumentar su riesgo de caídas con los consiguientes gastos de reparación no solo de los daños materiales, sino también de los daños corporales.