Con los avances en tecnología, cada vez es más habitual que las compañías aseguradoras dispongan de coberturas todo riesgo tecnológico para cubrir la rotura accidental de teléfonos móviles, dispositivos informáticos y aparatos de imagen y sonido.
El ramo de los seguros de hogar ha experimentado una gran evolución en los últimos años pasando de ofrecer pólizas cerradas y encorsetadas, con coberturas definidas y fijas, a seguros más personalizables, desarrollándose los seguros multirriesgo capaces de contemplar las más variadas coberturas.
Esta nueva cobertura que puede ser opcional o estar incluida por defecto en tu póliza de seguro del hogar, ofrece a los asegurados asistencia con el software y la conexión a Internet, además de asesoramiento sobre cualquier aspecto técnico. Además de en el software y los equipos informáticos, esta cobertura también se aplica a otros dispositivos tecnológicos como la cámara de fotos o de video digital, las tabletas, TDT o smartphones. Eso sí, tanto los programas como los equipos para los que se solicite asistencia deben ser domésticos, nunca profesionales. La cobertura de asistencia informática ofrece a los asegurados, principalmente, ayuda y asesoramiento para el manejo de determinadas herramientas y aplicaciones más habituales. También les resuelve las dudas o problemas que les surjan con la instalación o desinstalación de aplicaciones, así como con la configuración de sistemas operativos o con las actualizaciones de software. La forma que tienen las compañías de prestar el servicio de asistencia informática y tecnológica a sus asegurados suele ser, principalmente, de 2 clases: remota o presencial.
Como indicábamos los dispositivos amparados por este tipo de cobertura se encuentran cualquier modelo de Smartphone, tabletas, ordenadores (de sobremesa y portátiles) y de imagen y sonido (televisiones, reproductores UHD, DVD, altavoces, sistemas estéreo, cámaras de fotos, etc.), pero al igual que sucede con otro tipo de cobertura, en ésta también es conveniente leer las cláusulas para saber exactamente en qué casos la compañía no se hará cargo de la indemnización o reparación.
Hay que tener en cuenta en este sentido que la cobertura todo riesgo tecnológico no suele cubrir, como señalábamos anteriormente, los equipos que no sean de uso doméstico, como por ejemplo los que se utilicen para uso profesional. En el caso de que tu seguro de hogar no incluya esta cobertura, es recomendable analizar tus necesidades e incluir esta opción en tu póliza para evitar una situación de desamparo en estas situaciones.
Federico Martínez de la Puente. Abogado Seguros CEA